La oración es necesaria pues Jesús nos dijo que sin la ayuda de Dios no podríamos hacer nada. La oración es muy valiosa ya que nos permite aumentar o conseguir la gracia y amistad con Dios. Además, podemos obtener el perdón de muchos pecados y las gracias necesarias para evitar el mal y obrar el bien. Y siempre y cuando convengan para nuestra salvación también obtendremos ayuda material.
Orar nos permite elevar el alma a Dios para pedirle toda clase de beneficios espirituales y corporales, amarlo, agradecerle, honrarlo, suplicarle perdón y adorarlo. Debemos pedir principalmente bienes espirituales, orar por la salvación de las almas y pedir los medios para conseguir la eterna salvación. Y también podemos pedir, por supuesto, por los bienes materiales.
Siempre debemos orar con fe, humildad, fervor, devoción, confianza, mucha atención y perseverancia. Pero siempre que oramos Dios nos escucha, y si no nos da exactamente lo que pedimos, es porque nos va a dar algo que va ser mucho mejor para nuestra salvación y nuestro bien.