El alimento para el alma
Cristo, amor, bondad, paciente, adorar, Dios, hogar, regalo, familia

La familia requiere de un compromiso inquebrantable hacia el otro, incluso cuando todos sean sumamente conscientes de los defectos del otro.

El amor de Cristo es grande, sin límites, y en nuestra familia aunque existan peleas o momentos incómodos es una bendición maravillosa que nos regala. 

 

«El amor es paciente y bondadoso. El amor no es celoso ni fanfarrón ni orgulloso ni ofensivo. No exige que las cosas se hagan a su manera. No se irrita ni lleva un registro de las ofensas recibidas. No se alegra de la injusticia sino que se alegra cuando la verdad triunfa. El amor nunca se da por vencido, jamás pierde la fe, siempre tiene esperanzas y se mantiene firme en toda circunstancia.» (1 Corintios 13:4-7)