COMPASIÓN, SÍ; CELEBRACIÓN, NO
La comunidad de Ateneo celebró un evento el 15 de marzo llamado la marcha del Orgullo de Ateneo, “One Big Pride”. Los proponentes hablaron de esperanza y permitieron que las fortalezas brillaran y contribuyeran a un mundo mejor y al bien común.
Pedimos estar en desacuerdo y reiteramos las siguientes verdades:
1.- Solo hay dos sexos creados por Dios, es decir, masculino y femenino. El género es imagen social, como vemos con los géneros LGBTQIA + en constante evolución. Estos no tienen base en la naturaleza y en la realidad.
2.- Los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados y contrarios a la ley natural. La atracción del mismo sexo en sí misma es objetivamente desordenada.
3.- El mensaje de Orgullo LGBT y su celebración de la homosexualidad son contrarios a la fe católica y, por lo tanto, perjudican a los fieles, especialmente a los jóvenes.
Nos aseguramos que todas las personas merecen respeto y compasión. En realidad, los homosexuales en Filipinas son bien aceptados y no solo tolerados. Ciertamente no son discriminados ni perseguidos.
Pero como hemos visto en el mundo occidental, ¿a dónde podría llevar todo esto? Ya sabemos.
• Normalización e incluso celebración de la homosexualidad.
• Un mayor deterioro de la fe y la moral.
• Más asistentes a los desfiles del Orgullo Gay con vestimenta y comportamiento inmoral.
• Inclusión de género y aceptación de la enseñanza de LGBT a los niños de la escuela primaria.
• Hombres trans- género que invaden los baños de mujeres.
• Los transexuales recurren a medidas radicales para "cambiar" su sexo, como tomar hormonas o esteroides o someterse a una intervención quirúrgica.
• Horas de cuentos Drag Queen en las bibliotecas.
• Hombres trans-género que se hacen cargo de los deportes femeninos.
• Legislación que penaliza el llamado discurso de "odio" cuando se habla contra la homosexualidad.
Hacemos un llamado al Ateneo, y a todas las universidades católicas, para que vuelvan a la naturaleza misma de la educación católica, y eso es educar a hombres y mujeres católicos fuertes, que también están debidamente educados.
Hacemos un llamado a nuestros obispos para que eduquen a los fieles sobre la auténtica enseñanza católica sobre la homosexualidad y que defiendan con firmeza la fe, especialmente en las instituciones católicas de aprendizaje, que forman las mentes jóvenes de nuestros católicos.
Esperamos que este mensaje sea leido por los miembros de MPC - FFV.
Es el criterio de todo católico que vive su fe. El respeto si a todos los que
piensan distinto. Debe ser nuestra posición como hijos de Dios.
Saludos y bendiciones
Alberto y Magdalena